Hoy os quiero hablar un poco sobre Kiogna, una de las niñas más especiales de Wazo Huru School.
Kionga llegó a Chumvi con su madre y sus 2 hermanas poco antes de que nosotras llegásemos por primera vez en 2015.
Venían de una zona más al norte de Kenia buscando un lugar donde quedarse y encontraron Chumvi, donde les cedieron un poco de tierra y Christine, su madre, construyó una casa al estilo Turkana, de barro.
Durante estos años Kionga y sus hermanas han venido a nuestra escuela.
Primero daban clase bajo los árboles y cuando construimos el cole siguieron con su educación, y no solo eso, su madre también es alumna de nuestras clases de alfabetización, por lo que toda la familia es parte de Wazo Huru School.
Pero a mediados de 2019 todo cambió. Kionga y su familia, (ahora son uno más con su hermano más pequeño James), tuvieron que abandonar Chumvi por un problema con la tierra que les habían cedido en su momento.
Además, su casa se derrumbó y tuvieron que buscar otro lugar donde volver a levantar una nueva cabaña y lo peor es que este lugar estaba a más de 1hora y media de Chumvi y había que cruzar un pequeño río para ir de un lado a otro.
Durante varios meses los 4 niños han estado recorriendo esta distancia para venir a la escuela día tras día, el más pequeño de ellos, James solo tiene 3 años.
Pero ahora… todo ha cambiado, y esta vez, a mejor.
La nueva casa de Kiogna
– ¿Kiogna, de qué color quieres que sea la puerta y las ventanas de tu nueva casa?
– Verdes. Las quiero verdes como mi uniforme del cole.
Ayudar a la familia de Kiogna a tener una pequeña casa en Chumvi, a unos metros del colegio y en unas buenas condiciones era uno de los objetivos de este 2020 porque estaban pasando una situación difícil y tanto los 4 niños como su madre ponen mucho esfuerzo diario en mejorar su situación.
Es por eso que queríamos ayudarles, porque sabemos el esfuerzo que hacen a diario y las pocas posibilidades que tienen de conseguir salir de su situación sin un pequeño empujoncito.
Hablamos con Christine, conseguimos un trocito de tierra en Chumvi para ellos y empezó la construcción de «La casa de la puerta verde» donde toda la familia de Kiogna vive desde hace pocos días.
¿Cómo hacemos cosas como esta?
Muy fácil, gracias a todos los socios/as de Idea Libre, que nos impulsan diariamente a seguir trabajando y son, en parte, responsables de que hoy Kionga tenga un hogar donde vivir.
3 comentarios en «Kiogna y la casa de la puerta verde»
Qué bonita historia chicas, mil gracias una vez más por todo lo q hacéis!! Una suerte para esos niños haberos encontrado y para todos los que os conocemos❤️
MUCHAS GRACiAS. Una suerte para ellos y para nosotras tener a toda la gente que nos ayudáis a hacerlo!
Que grande es ver lo que hace la unión de muchos pocos…. y sólo su cara de ilusión por quereer labrarse un futuro mejor y tener esas ganas dde aprender, de mejorar…dde PODER ELEGIR, eso no tiene precio!!!!
Muchas Gracias María y Sandra por seguir este proyecto ilusionante… Y a los socios y socias de Idea Libre xq estamos hechos de una pasta especial y no es falsa modestia…
UN abrazo a tod@s
Roberto el «cantante» 🙂